Buen inicio de la COP28: en marcha el fondo para pérdidas y daños

Ani Dasgupta / World Resources Institute

Durante la sesión plenaria de apertura de las conversaciones sobre el clima de la COP28, los negociadores acordaron poner en marcha el fondo para pérdidas y daños, una decisión que adopta recomendaciones del Comité de Transición de Pérdidas y Daños, que se reunió a principios de diciembre por quinta vez, después de no lograr un consenso en sesiones anteriores.

Ani Dasgupta, presidente y director ejecutivo del World Resources Institute, afirmó que "justo al inicio de las conversaciones de la ONU sobre el clima, los países desarrollados y en desarrollo se unieron para poner en marcha el fondo de pérdidas y daños, que será un salvavidas para las personas al permitir a las familias reconstruir sus hogares después de un desastre, apoyar a los agricultores cuando sus cultivos sean arrasados ​​y reubicar a aquellos desplazados permanentemente por el aumento del nivel del mar".

Fue un resultado muy reñido, pero es un paso adelante. El éxito del fondo dependerá de la velocidad y la escala con la que los recursos comiencen a llegar a las personas necesitadas en países vulnerables, quienes enfrentarán hacia 2030 daños relacionados con el clima por hasta 580 mil millones de dólares... Y esta cifra seguirá en aumento.

Dasgupta considera “muy alentador que varios países hayan dado un paso adelante para poner en marcha el fondo para pérdidas y daños, con promesas que representan un giro dramático de los acontecimientos en comparación con hace apenas dos años, cuando no se sabía si alguna vez se podría convencer a los países desarrollados de respaldar un fondo para pérdidas y daños".

Aunque aún son insuficientes para lo que se necesita, pero estas contribuciones tempranas desempeñarán un papel fundamental para restablecer la confianza entre los países desarrollados y en desarrollo a medida que se pongan en marcha las conversaciones de la ONU sobre el clima. Este progreso es una de las piezas del rompecabezas que deben encajar para que la cumbre sobre el clima sea un éxito.

Es notable que los Emiratos Árabes Unidos igualaran a Alemania al ofrecer 100 millones de dólares; esta contribución amplía el número de naciones que proporcionan financiamiento climático.

Si bien la señal es positiva, es decepcionante que los Estados Unidos y Japón hayan contribuido con tan poco, dado el tamaño de sus economías; simplemente no hay excusa para que sus contribuciones sean eclipsadas por otros.

El financiamiento anunciado en la COP28 sólo será un pago inicial para ayudar a las personas a recuperarse de las pérdidas y los daños causados ​​por el cambio climático.

Durante 2024, los países deben dar un paso más adelante, con promesas mayores y movilizar fuentes innovadoras de financiamiento, como los impuestos a los combustibles fósiles y al transporte marítimo, concluyó Dasgupta.